Muchos libros de cocina y chefs recomiendan cocinar plátanos verdes antes de comerlos. ¿Es solo por todo el almidón? ¿O hay toxinas como en el brote de papas? ¿La relación de amilosa a amilopectina tiene algo que ver con la recomendación?
Muchos libros de cocina y chefs recomiendan cocinar plátanos verdes antes de comerlos. ¿Es solo por todo el almidón? ¿O hay toxinas como en el brote de papas? ¿La relación de amilosa a amilopectina tiene algo que ver con la recomendación?
Respuestas:
Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) "El plátano y el plátano no contienen niveles significativos de ningún principio tóxico". Los plátanos crudos e inmaduros pueden ser difíciles de digerir, especialmente si se comen en grandes cantidades. Hacerlo puede provocar malestar estomacal. Esto puede deberse al hecho de que contienen almidones resistentes (RS2) a las enzimas digestivas, compuestos que inhiben la producción de amilasa salival y cantidades significativas de amilosa.
Los plátanos y plátanos crudos e inmaduros también tienen una textura almidonada o cerosa y un sabor amargo que puede ser desagradable.
Si comes un plátano marrón muy maduro, saben igual que un plátano. Cualquier plátano que sea verde o amarillo, sabrá mejor pelado y cocido. Asegúrese de usar un pelador para esto, ya que es casi imposible quitar la piel de un plátano verde.