Volando con asientos asignados, solicito el asiento del pasillo, como un amplio ancho. Solicito sin disculpas un extensor de cinturón de seguridad al asistente primero. A veces, si no hay mucha gente alrededor, solicito una cuando paso al entrar. Sonrío y soy educado. No intento abrocharme el cinturón de seguridad hasta obtener el extensor. Levanto el reposabrazos antes de sentarme.
Cuando consigo el extensor, lo abrocho, pero solo después de que todos los pasajeros se hayan sentado en mi fila.
Si estoy volando hacia el suroeste donde los asientos no están asignados oficialmente, excepto A, B o C, tengo cuidado de iniciar sesión lo antes posible antes de salir para el aeropuerto para registrarme en el Grupo A, lo que me permite estar sentado durante el primer grupo. Elijo un asiento de pasillo y, como arriba, solicito un extensor, esperando abrocharme el cinturón de seguridad hasta que todos se hayan sentado en mi fila. Mientras espero que se sienten los Grupos B y C, me veo tan gordo e infeliz como sea posible. Arrugo la frente. Eso es todo. Hago contacto visual con todas las personas que caminan por ese pasillo y, usando mi mejor expresión de "Descanso" de cara *, mágicamente, nadie elige sentarse a mi lado.
Nunca te disculpes por tu talla. No me gusta que la mitad de mi muslo caiga al siguiente asiento, pero soy más ancho que una persona de 140 libras. ¿Y qué? Las aerolíneas eligen hacer sus asientos de 17 pulgadas (apenas) y nadie está "cómodo" durante un vuelo. Tienes derecho a estar allí como lo hace la persona más pequeña. Algunas personas hablan sin cesar, otras tienen un aliento horrible que lo deja a 10 pies de distancia, algunas beben mucho, crujientes o nueces en el oído, algunas personas necesitan un baño o no usan desodorante. Otros se tiran pedos. Somos cada uno diferente. Hay varias cosas que me incomodan física o mentalmente cuando vuelo. Mi circunferencia adicional es lo que hace que otros se sientan incómodos conmigo. Soy consciente de ello. Me pregunto si son igualmente conscientes de sus propias idiosincrasias.
Feliz viaje!