En los viejos tiempos, cuando dictaminaron los CRT, recuerdo que los monitores se fabricaron específicamente para la ubicación en el mundo en el que se iban a vender. Entre otras cosas, el campo magnético de la Tierra influyó en la pantalla (o algo así). Esto significaba, por ejemplo, que comprar un monitor CRT en los EE. UU. Y llevarlo de regreso a Nueva Zelanda no era una buena idea, y no solo por el cargo por exceso de equipaje.
¿Esto se aplica a los monitores LCD?
¿Hay algún inconveniente que debería tener en cuenta si tengo la intención de traer una buena pantalla LCD a casa en mi próximo viaje?