La regla general es que la capacidad de atención de un niño debe ser de un minuto por cada año de edad. Entonces, 3 minutos es aceptable para un niño de 3 años.
Parece que su necesidad de moverse es el mayor problema para ti. Es interesante que la investigación basada en el cerebro indique que el movimiento realmente maximiza el aprendizaje, por lo que nuestro modelo de sentarse y aprender probablemente no sea la mejor estrategia. Sin embargo, crear formas de moverse mientras se está en un espacio pequeño puede ser beneficioso.
Aquí hay algunas estrategias que he usado.
Haga que se siente sobre una pelota colocada dentro de un anillo que evita que ruede, un pequeño anillo inflado de piscina o un pequeño tubo interior. La capacidad de moverse y, sin embargo, permanecer en su lugar les brinda a muchos niños la información vestibular que anhelan mientras los limita a un espacio limitado.
La presión profunda también puede dar retroalimentación propioceptiva que calma a otros niños. Colocar libros pesados (las guías telefónicas de las grandes ciudades funcionan muy bien) en las mochilas o requieren un trabajo pesado, como mover objetos más pesados de un lugar a otro, son actividades relajantes. Por supuesto, los libros y objetos no deberían ser demasiado pesados.
Otros pueden sentarse con más calma cuando se agrupan apretadamente, obteniendo una gran entrada propioceptiva. Mantener en su regazo doblando las rodillas hacia el pecho y abrazar profundamente es una posición relajante para muchos. Esto es similar a envolver pero solo usando los brazos.
Algunos niños estarán más tranquilos después de columpiarse, saltar, correr o tener una vivienda áspera. Estas actividades también proporcionan información propioceptiva profunda que el sistema nervioso necesita para asistir y sentarse de manera óptima.
Además, una silla de apoyo adaptada al tamaño del niño es beneficiosa. Los brazos en la silla deben apoyar la parte superior del cuerpo. La profundidad del asiento debe coincidir con el tamaño del niño desde la cadera hasta las rodillas y los pies deben tocar el piso para mayor estabilidad.
Además, tener una bolsa de inquietudes puede ayudar a mantener su interés. Estos juguetes deben permitir jalar, torcer o morder y dar sensaciones frías mientras se sostienen con la mano. La masilla, el gak y los juguetes sensoriales que aplastan, estiran y vibran con una textura única son relajantes para muchos.
Puede obtener otras ideas al investigar información sobre estrategias de integración sensorial.