Quejarse de los niños no es "genial", especialmente cuando son pequeños, aunque es moral y legalmente justo. Es bueno encontrar una alternativa, me alegra que hayas comenzado a pensar en esto.
Ahora, ¿cuál es una forma genial de manejar esos monstruos adorables y pequeños y adorables?
Paso 1: Hazte amigo de ellos. Puede pensar que esto no vale la pena en el primer momento, pero confíe en que jugar con niños lo ayuda de muchas maneras.
Paso 2: explíqueles su problema y ellos lo entenderán ahora.
La cuestión es que a los niños no les gusta seguir órdenes, especialmente si se mete con sus cosas favoritas (jugar al cricket con una pelota dura en su caso). Pero, si los amigos preguntan lo mismo, ellos "escuchan".
Simple, problema resuelto y ahora también tienes más amigos.