Me gustaría preparar una tetera y guardarla en un termo para mantenerla caliente durante la noche y poder beberla antes de salir de la cama.
Probé este enfoque y descubrí que aunque el té sabía bien recién hecho, por la mañana el té es extremadamente astringente, como si hubiera estado hirviendo con las hojas todo el tiempo.
Mi suposición es que, aunque había hecho un intento de colar el té antes de agregarlo al termo, se suspendió suficiente polvo del té como para que continuara preparándose, liberando taninos y volviendo la bebida muy seca.
¿De qué maneras puedo reducir este efecto? He pensado en preparar hojas sueltas en lugar de bolsas, aunque sé que también habrá polvo allí. ¿Quizás podría colar a través de un medio más efectivo que las bolsas de té o el colador de té? ¿O tal vez debería enfriar un poco el té antes de agregarlo al termo?