Muchas veces, los Grandes Maestros no harán planes concretos. El plan podría ser general : "Tengo que atacar al rey enemigo", sin tener en cuenta ningún orden de movimiento específico . Además, muchas veces los grandes maestros hacen movimientos basados únicamente en la intuición que en el análisis concreto. Puede parecer a los observadores que el gran maestro ha estado "planeando", pero puede ser que todo esto mientras él / ella simplemente se aseguraba de que su intuición fuera sólida, o incluso ocasionalmente se distraía por algún pensamiento irrelevante.
Mikhail Tal observa uno de esos incidentes famosos en su propia vida (énfasis mío):
Nunca olvidaré mi juego con el GM Vasiukov en un Campeonato de la URSS. Llegamos a una posición muy complicada donde tenía la intención de sacrificar a un caballero . El sacrificio no fue obvio; hubo una gran cantidad de posibles variaciones; pero cuando comencé a estudiar mucho y a trabajar en ellos, descubrí con horror que no saldría nada de eso. Ideas apiladas una tras otra. Transmitiría una respuesta sutil de mi oponente, que funcionó en un caso, a otra situación en la que, naturalmente, resultaría bastante inútil. Como resultado, mi cabeza se llenó con una pila completamente caótica de todo tipo de movimientos, y el infame "árbol de variaciones", del cual los entrenadores de ajedrez recomiendan que corte las pequeñas ramas, en este caso se extendió con una rapidez increíble.
Y de repente, por alguna razón, recordé el clásico pareado de Korney Ivanović Chukovsky: "Oh, qué trabajo tan difícil fue. Sacar del pantano el hipopótamo" . No sé de qué asociaciones se metió el hipopótamo en el tablero de ajedrez, pero aunque los espectadores estaban convencidos de que continuaba estudiando el puesto, yo, a pesar de mi educación humanitaria, estaba tratando de resolverlo en este momento: ¿cómo? arrastrar un hipopótamo fuera del pantano? Recuerdo cómo figuraban los gatos en mis pensamientos, así como las palancas, los helicópteros e incluso una escalera de cuerda.
Después de una larga consideración, admití la derrota como ingeniero, y pensé rencoroso para mí mismo: "Bueno, ¡solo déjalo ahogarse!" Y de repente el hipopótamo desapareció. Salió del tablero de ajedrez justo como había llegado ... ¡por su propia voluntad! Y enseguida la posición no parecía ser tan complicada. Ahora, de alguna manera, me di cuenta de que no era posible calcular todas las variaciones, y que el sacrificio de caballero era, por su propia naturaleza, puramente intuitivo. Y como prometía un juego interesante, no pude evitar hacerlo.
Y al día siguiente, fue un placer leer en el periódico cómo Mikhail Tal, después de pensar cuidadosamente en la posición durante 40 minutos, hizo un sacrificio de pieza calculado con precisión.
- Mikhail Tal, La vida y los juegos de Mikhail Tal.
Aquí está el juego para su placer visual. El sacrificio de caballero está en movimiento 19.
1. e4 c6 2. Cc3 d5 3. d4 dxe4 4. Ce4 Cd7 5. Cf3 Ngf6 6. Cg3 E6 7. Ad3 C5 8. OO cxd4 9. Cd4 Ac5 10. Cf3 OO 11. Qe2 B6 12. Af4 JLb7 13. Rad1 Cd5 14. Bg5 Dc7 15. Ch5 Kh8 16. Be4 f6 17. Bh4 Bd6 18. c4 Ba6 19. Cg7 Kg7 20. Cd4 Cc5 21. Qg4 Kh8 22. Ne6 Ne6 23. De6 Rae8 24. Dd5 Bh2 25. Kh1 Qf4 26. Qh5 Qe4 27. Rfe1 Qg6 28. Qg6 hxg6 29. Bf6 Kg8 30. Re8 Re8 31. Kh2 Bc4 32. Rd7 Re6 33. Bc3 Ba2 34. Ra7 Bc4 35. Kg3 Bd5 36. f3 Kf8 37. Ad4 b5 38. Kf4 Ac4 39. Kg5 Ke8 40. Ra8 Kf7 41. Ra7 Ke8 42. b4 Ad5 43. Ra3 Kf7 44. g4 Re2 45. Bc5 Re5 46. Kh6 Re6 47. Rd3 Bc6 48. Rd8 Te8 49. Td4 Re6 50. f4 Re8 51. Rg7 Be4 52. Ab6 Af3 53. Td8 Re7 54. Rd3 JLe2 55. BD8 Re8 56. Rd2 Re3 57. JLg5 Ad3 58. f5