Rick Briggs se refiere a la dificultad que tendría una inteligencia artificial para detectar el verdadero significado de las palabras habladas o escritas en uno de nuestros idiomas naturales. Tomemos, por ejemplo, una inteligencia artificial que intenta determinar el significado de una oración sarcástica.
Naturalmente, la frase "¡Eso es justo lo que necesitaba hoy!" puede ser la expresión de sentimientos muy diferentes. En un caso, una persona feliz que encuentra un artículo que se había perdido por algún tiempo podría emocionarse o alegrarse del evento, y exclamar que este momento de triunfo era exactamente lo que su día necesitaba para continuar feliz. Por otro lado, un empleado de oficina descontento que tiene un día difícil podría empeorar accidentalmente su situación al derramarse café caliente sobre sí mismo y exclamar sarcásticamente que esta molestia adicional era exactamente lo que necesitaba hoy. En esta situación, esta frase debe interpretarse como el hombre que expresa que derramarse café sobre sí mismo empeoró su mal día.
Este es un pequeño ejemplo que explica la razón por la cual el análisis lingüístico es difícil para la inteligencia artificial. Cuando se habla de este ejemplo, pequeñas fluctuaciones tonales e indicadores son extremadamente difíciles de detectar con precisión para una IA con micrófono; y si la oración fuera simplemente leída, sin contexto, ¿cómo se distinguiría un ejemplo del otro?
Rick Briggs sugiere que el sánscrito, una forma antigua de comunicación, es un lenguaje hablado naturalmente con reglas mecánicas y gramaticales que permitirían que una inteligencia artificial interprete las oraciones con mayor precisión durante el análisis lingüístico. Un análisis lingüístico más preciso daría como resultado una inteligencia artificial capaz de responder con mayor precisión. Puede leer más sobre los pensamientos de Rick Brigg sobre el idioma aquí .